Espárragos blancos gratinados con bechamel de queso azul

Ingredientes:
Producto | Cantidad |
---|---|
Espárragos blancos extra Conservas Rubio (enteros) | 2 frascos (aprox. 16–18 u.) |
Leche entera | 500 ml |
Harina de trigo | 30 g |
Mantequilla | 30 g |
Queso azul (cabra o vaca) | 80 g desmenuzado |
Nuez moscada rallada | 1 pizca |
Pimienta blanca | 1 pizca |
Sal fina | Al gusto |
Parmesano o grana padano rallado | 2 cucharadas |
Aceite de oliva virgen extra | 1 cucharada |
Elaboración:
1. Escurrido y secado perfectos
Abre los frascos y escurre los espárragos con suavidad.
Colócalos sobre papel de cocina y sécalos con toques muy ligeros: evitarás exceso de agua que diluiría la bechamel.
2. Alineación en la fuente
Unta la base de una fuente apta para horno con el aceite de oliva.
Dispón los espárragos en una sola capa, todos en la misma dirección. Reserva mientras preparas la salsa.
3. Bechamel exprés de queso azul
Funde la mantequilla en un cazo a fuego medio.
Incorpora la harina, remueve 1 minuto sin que tome color (roux rubio).
Añade la leche templada en hilo, batiendo con varillas para evitar grumos.
Cuece 4–5 minutos hasta que espese y burbujee suavemente.
Agrega el queso azul desmenuzado; deja que se funda. Ajusta de sal, nuez moscada y pimienta blanca. La textura debe quedar cremosa pero fluida.
4. Napado y gratinado
Vierte la bechamel caliente sobre los espárragos, cubriéndolos por completo.
Espolvorea parmesano para crear costra dorada.
Gratina 6–8 minutos en horno precalentado a 220 °C con función grill, hasta obtener superficie burbujeante y dorada.
5. Emplatado y toque final
Deja reposar 3 minutos: la salsa se asienta y realza sabor.
Decora con cebollino picado, granillo de nuez o pimienta rosa mortero para contraste crocante y colorido.
Sirve caliente acompañado de pan rústico para aprovechar la salsa.