PREPARACIÓN

1. Escurre y prepara las piparras

Saca las piparras Rubio del frasco y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de líquido.
Corta con cuidado la parte superior (sin quitar el tallo completamente) para poder introducir el relleno. Si son muy finas, puedes abrirlas por un lateral con una incisión pequeña.

2. Prepara la crema de queso

En un bol, mezcla el queso crema con el requesón, la miel, una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva.
Bate con un tenedor o una varilla hasta conseguir una textura suave, cremosa y homogénea.
Si prefieres un toque más fresco, añade unas gotas de limón o una pizca de ralladura.

3. Rellena las piparras

Introduce la mezcla en una manga pastelera o en una bolsa de plástico con una esquina cortada.
Rellena cada piparra con cuidado, sin presionar demasiado para evitar que se rompa la piel.
Colócalas en una bandeja o fuente, manteniendo su forma natural.

4. Añade el toque final de granada

Justo antes de servir, decora cada piparra con unos granos de granada fresca por encima o en el plato.
El contraste entre el verde intenso del pimiento y el rojo brillante de la fruta hace que el plato luzca atractivo y moderno.

5. Opcional: un acabado profesional

Para un toque más gourmet, puedes añadir un hilo de miel o unas gotas de reducción de vinagre balsámico.
También puedes espolvorear cebollino fresco picado o un poco de queso rallado curado muy fino para dar un punto extra de sabor.