1. Lava las fresas, retírales el pedúnculo, córtalas por la mitad y ponlas en un bol.

2. Añade el azúcar y el zumo de limón y remueve. Tapa el bol con film transparente y deja reposar 1 hora aproximadamente para que las fresas suelten su jugo.

Si no te gusta la mermelada con trozos, puedes triturarla con la batidora (opcional). Deja que hierva unos minutos más y retira la espuma si es necesario.

3. Reparte la mermelada caliente en tarros de cristal previamente esterilizados. Cierra bien los tarros.

4. Sirve la mermelada de fresa.